El conflicto colombiano ha dejado víctimas y verdugos en todos sus bandos. Uno de los conflictos más enquistados y duraderos del planeta sigue generando ríos de tinta, si bien mejor que los de sangre.
El cine se ha hecho eco de esta situación en innumerables ejemplos, y este es uno de los más recientes.
La película "Tiempo sin aire" del director Samuel Martín Mateos es una propuesta interesante, una visión muy concreta desde el punto de vista de víctima / verdugo, aunque en ocasiones el espectador dude de quién es quién.
Dejando de lado la dureza de la historia, nos encontramos con una situación excepcional que es llevada con absoluta normalidad a nuestro entorno conocido. Me explico, una joven madre colombiana busca venganza por la violación y muerte de su hija adolescente. Esa venganza la trae a las Canarias, en donde vive uno de los asesinos, un soldado de fortuna que aquí era un ciudadano modelo.
El espectador vive con intensidad el proceso de búsqueda, la desesperada determinación de una madre, Juana Acosta quien lo borda en su papel de madre obsesiva venezolana que mientras urge la reparación de lo hecho con su hija, olvida al otro hijo que sigue vivo y traumatizado.
De este último se encarga un Carmelo Gómez con un papel curioso, un psicólogo que quizá necesita más de sus conocimientos que sus propios pacientes. Un hombre solitario, algo despistado y en ocasiones hasta un tío simpático.
Carmelo Gómez debería ser considerado patrimonio nacional cinematográfico. Alguien debería encerrarle en la filmoteca nacional y obligarle a hacer un mínimo de dos películas anuales. No puede decir públicamente que abandona el cine para dedicarse al teatro, me alegro por los aficionados al teatro pero los cinéfilos necesitamos nuestra dosis de "carmeloína", una droga que proporciona un actor camaléonico, alguien que ha mirado de tú a tú, directamente a los ojos, a Javier Bardem y todavía siguen en tablas. Carmelo, apiádate de nosotros. Sé que te quejas por el trato injusto que la política le ha dado al cine y estimas que le seguirá dando un trato todavía peor. Por favor considera tu postura, no tenemos ojos en la espalda para mirar siempre hacia atrás, como se dice en "Tiempo sin aire"
Carmelo, espero que al menos, esas intenciones tuyas de abandonar el cine tengan la misma consistencia que las de Moncho Borrajo o los Suaves, que llevan años dejándolo y cada temporada cuelgan un nuevo cartel.
Quiero seguir subiendo al monte Carmelo y rozar al dios audiovisual en el altar del celuloide.
Carmelo, no se haga tu voluntad, sino tus películas.
Amen.
Tráiler de la película:
Ficha de la película:
Titulo: Tiempo sin aire
Año: 2015
Duración: 106 min.
País: España
Director: Samuel Martín Mateos, Andrés Luque Pérez
Reparto: Juana Acosta, Carmelo Gómez, Adriana Ugarte, Félix Gómez, Juan Pablo Shuk, Toni Acosta
Sinopsis: María, una enfermera colombiana que perdió a su hija a manos de tres paramilitares, viaja desde Colombia acompañada por su hijo pequeño, hasta Santa Cruz de Tenerife para encontrar y vengarse de uno de los asesinos. Guarda una foto que encontró en su hogar destruido, con un rostro, una dedicatoria y un nombre: Iván. Gonzalo, un psicólogo escolar cuya existencia da un vuelco el día que conoce a Maria, se implicará con ella en su incesante y obsesiva búsqueda. Mientras tanto, ajenos a todo, en algún rincón de la capital canaria, la vida de Iván y su novia Vero está a punto de cambiar para siempre. (Fuente: FILMAFFINITY)
El cine se ha hecho eco de esta situación en innumerables ejemplos, y este es uno de los más recientes.
La película "Tiempo sin aire" del director Samuel Martín Mateos es una propuesta interesante, una visión muy concreta desde el punto de vista de víctima / verdugo, aunque en ocasiones el espectador dude de quién es quién.
Dejando de lado la dureza de la historia, nos encontramos con una situación excepcional que es llevada con absoluta normalidad a nuestro entorno conocido. Me explico, una joven madre colombiana busca venganza por la violación y muerte de su hija adolescente. Esa venganza la trae a las Canarias, en donde vive uno de los asesinos, un soldado de fortuna que aquí era un ciudadano modelo.
El espectador vive con intensidad el proceso de búsqueda, la desesperada determinación de una madre, Juana Acosta quien lo borda en su papel de madre obsesiva venezolana que mientras urge la reparación de lo hecho con su hija, olvida al otro hijo que sigue vivo y traumatizado.
De este último se encarga un Carmelo Gómez con un papel curioso, un psicólogo que quizá necesita más de sus conocimientos que sus propios pacientes. Un hombre solitario, algo despistado y en ocasiones hasta un tío simpático.
Carmelo Gómez debería ser considerado patrimonio nacional cinematográfico. Alguien debería encerrarle en la filmoteca nacional y obligarle a hacer un mínimo de dos películas anuales. No puede decir públicamente que abandona el cine para dedicarse al teatro, me alegro por los aficionados al teatro pero los cinéfilos necesitamos nuestra dosis de "carmeloína", una droga que proporciona un actor camaléonico, alguien que ha mirado de tú a tú, directamente a los ojos, a Javier Bardem y todavía siguen en tablas. Carmelo, apiádate de nosotros. Sé que te quejas por el trato injusto que la política le ha dado al cine y estimas que le seguirá dando un trato todavía peor. Por favor considera tu postura, no tenemos ojos en la espalda para mirar siempre hacia atrás, como se dice en "Tiempo sin aire"
Carmelo, espero que al menos, esas intenciones tuyas de abandonar el cine tengan la misma consistencia que las de Moncho Borrajo o los Suaves, que llevan años dejándolo y cada temporada cuelgan un nuevo cartel.
Quiero seguir subiendo al monte Carmelo y rozar al dios audiovisual en el altar del celuloide.
Carmelo, no se haga tu voluntad, sino tus películas.
Amen.
Tráiler de la película:
Ficha de la película:
Titulo: Tiempo sin aire
Año: 2015
Duración: 106 min.
País: España
Director: Samuel Martín Mateos, Andrés Luque Pérez
Reparto: Juana Acosta, Carmelo Gómez, Adriana Ugarte, Félix Gómez, Juan Pablo Shuk, Toni Acosta
Sinopsis: María, una enfermera colombiana que perdió a su hija a manos de tres paramilitares, viaja desde Colombia acompañada por su hijo pequeño, hasta Santa Cruz de Tenerife para encontrar y vengarse de uno de los asesinos. Guarda una foto que encontró en su hogar destruido, con un rostro, una dedicatoria y un nombre: Iván. Gonzalo, un psicólogo escolar cuya existencia da un vuelco el día que conoce a Maria, se implicará con ella en su incesante y obsesiva búsqueda. Mientras tanto, ajenos a todo, en algún rincón de la capital canaria, la vida de Iván y su novia Vero está a punto de cambiar para siempre. (Fuente: FILMAFFINITY)